Los grabados paleolíticos de Armintxe fueron descubiertos en 2016 y desde entonces han sido analizados por un amplio grupo de investigadores. Ahora, la Diputación Foral de Bizkaia ha dado a conocer los resultados de las investigaciones y ha destacado, entre otras cosas, la técnica de realización de los grabados.
El estudio de los grabados ha sido dirigido por el catedrático del Instituto Internacional de Investigaciones de la Prehistoria de Cantabria, César González Sainz, quien afirma que "en los procedimientos técnicos se encuentra la principal característica de Armintxe".
El arqueólogo Diego Garate Maidagan coincide con él. Explica que las cuevas de nuestro entorno son de piedra caliza. Los muros de Armintxe, por su parte, son de calcarenita, más blandos que los de caliza, lo que dificulta la grabación tradicional. Así, en lugar de hacer estrías delgadas y profundas con un objeto cortante, se rasparon en superficie líneas simples, bastante gruesas (12-15 mm) y poco profundas (3-4 mm).
Además, González Sainz puntualiza que los grabados se dividen en tres campos y que han encontrado más imágenes. En total se han catalogado 68 imágenes: Pertenecen a 37 animales (23 caballos, 4 bisontes, 4 cabras, 2 leones, un cérvido sin especificar y 3 bocetos de una cuadrupedia sin especificar) y el resto, signos abstractos y rayas.
Otros trabajos realizados por especialistas son la adecuación de pasos, el estudio ambiental y el estudio hidrológico.