Científicos de Berlín consiguen sintetizar un medicamento eficaz para tratar el dolor y sin efectos secundarios. El nuevo analgésico es opioide, pero no produce los efectos secundarios de la morfina y otros opioides: náuseas, apnea, úlceras, estreñimiento, hemorragias, dependencia y, a altas dosis, incluso la muerte.
Los opioides se utilizan para eliminar el dolor en tejidos inflamados, como postoperatorios o en cánceres, pero en realidad actúan sobre todo el cuerpo. Sin embargo, el nuevo analgésico NFEPP sólo actúa en zonas inflamatorias, ya que sólo se asocia a receptores celulares en condiciones ácidas. Dado que el pH típico de los tejidos es neutro, la acidez sólo se encuentra en zonas de inflamación.
Al probarlo en ensayos clínicos con animales, descubren que el nuevo opioide tiene un alto poder analgésico en los tejidos aumentados, pero que los tejidos sanos no reaccionan al analgésico. Por tanto, no adorna todo el cuerpo ni crea adicciones.
La investigación ha sido presentada por la revista Science.