El lector Xerox-Kurzweil ofrece a los invidentes la capacidad de leer cualquier texto. Tiene las dimensiones de una maleta y pesa 8,6 kilos. En cuanto al funcionamiento, divide su trabajo en dos fases: por un lado realiza la lectura de los caracteres y por otro la síntesis de la voz.
Se basa en la Inteligencia Artificial para la lectura de caracteres. Forma del carácter, dirección de las curvas, características específicas de cada carácter, etc. las analiza sin tener en cuenta su tamaño y estilo. El lector dispone de un diccionario propio para poder comprobar una a una las palabras que lee. El equipo tiene dos versiones diferentes, una compuesta por un sintetizador de voz y un scaner automático de sobremesa.
En este modelo se puede incluir un conjunto de páginas, ya que el scaner las pasa automáticamente a medida que las lee. El scaner es capaz de distinguir entre texto e imágenes y de saber si el texto está organizado de forma continua o en columnas. Además, puede guardar el texto en la memoria y pasarlo a una cinta de casetas o un ordenador.
Esta versión utiliza cuatro voces diferentes, entre ellas la de un hombre, un niño y una mujer. Lee entre 120 y 350 palabras por minuto y respeta la entonación o melodía que expresan los signos de puntuación.
La segunda versión se compone de un sintetizador de voz y un scaner manual. Scaner utiliza una “plantilla” específica para leer las páginas. “Plantilla” y scaner tienen componentes magnéticos para que el scaner siga las líneas en movimiento.