Los cables coaxiales transportan señales de televisión y radio porque, a pesar del pequeño diámetro del cable, son capaces de transportar ondas de gran longitud de onda. Para poder hacer lo mismo con la señal óptica, unos físicos estadounidenses fabrican un cable coaxial de tamaño nanoscópico. Este nanocable transportará luz en el lugar de la electricidad, por lo que podrá usarla en microscopios ópticos y otros aparatos ópticos. Para lograrlo, el nanocable tiene la misma estructura que los cables coaxiales simples, separados por dos capas aislantes de conductor. El interior es un nanotubo, la capa exterior es metálica y entre ambos está formada por óxido de aluminio.